Una vez asumido el Francis Bacon correcto fuimos al estudio que trasladado pieza a pieza (con todo su desorden incluido) es la sala estrella de la colección en un ala separada donde se conservan también varias obras inacabadas del maestro del caos y del desorden. Las citas que adornaban las paredes justificaban que el desorden es el entorno creativo adecuado para el artista. Es decir, Francis entiende el por qué de mi cuarto, tanto él como yo jugamos a hacer pilas de objetos y saltar sobre ellos para llegar a cualquier cosa útil. La desaparición de los muebles bajo la mugre de su estudio no es, aún, tan clara en mi cuarto pero ahora que me ha dado la justificación perfecta es cuestión de tiempo.
El resto de las salas con más Bacons, Renoirs, Degas, Manetsy Monets, y mi favorito Robert Ballagh reinterpretando a Goya.
Reflexión poética de Francis:
“La ocasión hay que crearla, no esperar a que llegue”.
1 Comentarios
Esa sala no se diferencia mucho de mi casa la semana que tengo que currar 8 días seguidos... jajaja.
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