CON SOTANAS Y A LO LOCO: LOS CURAS MÁS BUENORROS DEL CINE

Dicen que de todo hay en la viña del Señor. Y aquí estoy yo como prueba de ello. Entre mis múltiples rarezas hay una que me gusta denominar: Efecto Pájaro Espino. Consiste en que independientemente de lo buenorro que esté el actor si le calzan un buen alzacuellos (en el sentido literal) se puede convertir en un autentico mito sexual.

Y he aquí un ranking de las mejores sotanas que han paseado por las pantallas últimamente.


PUESTO NÚMERO 1. EWAN MCGREGOR EN ÁNGELES Y DEMONIOS

Um. Si, a parte de la controversia sobre la dudosa calidad de Ángeles y Demonios sólo hay algo que no puedo cuestionar: Al escocés le queda la sotana de muerte.

Y es que ya estaba muy claro que daba lo mismo lo que le pusieran encima que con túnica Jedi o despelotado McGregor siempre daba la talla.

Entre los looks que pasea por la pantalla hay uno especialmente insinuante al que me gusta llamar “Estilo monaguillo” con su camisola blanca sobre la sotana. Así, en plan primera comunión, que le calzas un mini botafumeiro y queda ideal de decoración.

Pero sobretodo me gustaría felicitar al que decidió poner a su sotana “oficial” un cinturón para estilizar aún más la figura del pequeño camarlengo en esta cinta de Ron Howard. No tiene precio ver cómo avanza por el Vaticano con la falda al viento.

¡Tórrido!


PUESTO NÚMERO 2. RUSSELL CROWE EN RÁPIDA Y MORAL

Dicen que Sharon Stone eligió muy bien el reparto.

Algunos sostienen que quería probar al pimpollo de Leonardo DiCaprio pero en realidad los que tenemos buen gusto sabemos que a quien quería dar buen uso es al australiano Russell Crowe que por aquel entonces era un don nadie en Hollywood.

Ella, ni corta ni perezosa, se encargó de dar buen magreo a esos pantalones de cuero. Y el resto ya es historia...

Yo recuerdo con cariño esta película infumable sólo por la perspectiva de ese alzacuellos…

¡Soy débil!


PUESTO NÚMERO 3. GABRIEL BYRNE EN STIGMATA

Tengo un problema con este buen hombre y es que si en Stigmata estaba para agarrarse a la silla en El Fin de los Días haciendo de Satán tenía también un punto la mar de interesante.

Pero esta vez decantamos la balanza a favor del bien y le dejamos disfrutar de su merecido puesto en el ranking sacerdotal.



PUESTO NÚMERO 4. HEATH LEDGER EN EL DEVORADOR DE PECADOS

Aunque a título póstumo hay que reconocer que entre las producciones basura con las que nos obsequió Ledger hay que hacer un hueco a esta semibasurilla de pseudoterror. En ella él y su sotana estaban asqueados del mundo y renegado se adentra en la investigación truculenta que le llevará a descubrir los vericuetos de La Orden.

Aburrida película que contaba, eso sí, con el incentivo de disfrutar del rubio actor con su alzacuellos.


PUESTO NÚMERO 5. PAUL BETTANY EN EL MISTERIO DE WELLS

Parece que a Bettany lo que en realidad le gustan son los atuendos monacales. Pero como una no está dispuesta a hacer distinciones de rango merece un puesto de honor en la lista, pero no por su taquillero malo de El Código DaVinci. Una tiene sus cosas pero aún conserva el gusto y el monje albino no acabó de convencerme.

Sin embargo El Misterio de Wells, coproducción con España y protagonizada por Willem Dafoe a pesar de su escasa calidad copiada prácticamente de El Nombre de la Rosa sí tenía un par de escenas y un look mucho más acorde con mis gustos masculinos. Incluía una escena bastante explícita con Miriam Aguilera que todavía está en mis retinas.

¡Ñami!

Además como es casi al inicio de metraje no es necesario seguir sufriendo, se puede tranquilamente apagar la tele y seguir viviendo tranquilo.


PUESTO NÚMERO 6. ANTONIO BANDERAS EN EL CUERPO (THE BODY)

Permítanme aclarar que el malagueño no me gusta mucho…. Excepto en esta película.

Y es que a pesar de no tener ni pies ni cabeza eso de dejar a ese hombre poniéndose y quitándose atuendos religiosos consigue que todas las navidades celebre las fiestas con un visionado de la misma.


PUESTO NÚMERO 7. SEAN CONNERY Y CRISTIAN SLATER EN EN EL NOMBRE DE LA ROSA

Si, Sean Connery está de buen ver y no importan los años, la calva, o el aspecto que le pongan. ¡Por Dios, Bond con hábito!

Pero tiene un gran rival, porque el pizpireto Slater y su iniciación sexual en la cocina, pese a su terrible corte de pelo (como si tuviera el pobre otra opción) le hacen un poco de sombra. Así que les dejaremos compartir puesto.


PUESTO NÚMERO 8. JEREMY IRONS EN LA MISION

Si, Jeremy Irons es todo un señor. Y en La misión consigue convertirse en un sueño hecho realidad. Venga trepar, venga dar misa. ¡Oye, cosa mala! Además no deja de ser “español”, aunque sólo sea por el orgullo patrio, ¿no?


PUESTO NÚMERO 9. GAEL GARCIA BERNAL EN EL CRIMEN DEL PADRE AMARO

Gael García Bernal es sexy con y sin sotana. Y mejor sin ella si me dejan dar mi opinión.

Pero… Mira, así se gana un huequito en el ranking.


PUESTO NÚMERO 10. JOSEPH FIENNES EN LUTERO

Este puesto tan bajo para el protagonista de Shakespeare In love se lo debe simplemente al look terrible de la época. Si, no se puede remediar que con capuchón y rimel se vea relegado al último puesto. Una penita.



Y no, no pienso poner a Cantinflas en El Padrecito. ¡Un respeto oye! Que hasta yo tengo un límite.

No os preocupéis, después de escribir todo esto iré a confesarme. ¡Qué remedio!