Con el veranito llega el momento de dejarse seducir por las fiestas madrileñas y hemos comenzado la temporada con la puesta de largo del coche más “corto” de Toyota, su iQ.
¿Os he mencionado que me he sacado el carné de conducir?. ¡Un suplicio oye! Y del seguro ni te hablo que me dan depresiones crónicas. Pero en estos meses he descubierto:
1. Se conduce fatal en las ciudades.
2. Se aparca peor
3. Acabas yendo a todas partes en transporte público sólo por ahorrarte el suplicio de ir a un parking y gastarte un sueldo en dejarlo un par de horas.
Cuando conoces el nuevo iQ enseguida te viene a la mente ciudades como Roma, donde el aparcamiento brilla por su ausencia, la conducción es complicada y las calles intrincadas y enrevesadas. Y es que con el índice de vehículos que pueblan las calles se está imponiendo un rediseño de los automóviles a marchas forzadas para dar cabida a todos ellos. Para este tipo de ciudades los automóviles han evolucionado llegando por fin a un diseño inteligente como el del iQ, un motivo para volver a tener placer por conducir.
Desde 2007 Toyota es la primera marca de fabricantes mundial de automóviles y cada vez es más habitual ver sus vehículos por las calles y garajes. Pero han dado un pasito más para convertirse en una pieza básica de los utilitarios especialmente diseñados para las ciudades. Su nuevo modelo Toyota iQ es ideal para circular por una gran urbe, pequeño y recogido, con un consumo mínimo es ideal para aparcar en cualquier parte y tener la funcionalidad necesaria para desplazarse cada día.
El miércoles 17 de junio en el céntrico Hotel Me me presentó el nuevo coche de la prestigiosa marca japonesa: El Toyota iQ . Tuvimos la oportunidad de comprobar de primera mano su espacioso interior en contraposición con su volumen exterior. Un coche que posee todas las comodidades y unas dimensiones únicas: menos de tres metros de largo y poco más de metro y medio de ancho y con tres plazas (+1).
¿Cómo es posible?
Primero con un diseño interior asimétrico, en el que el conductor dispone del sitio necesario (de ahí su variable número de plazas) y por otro lado con un diseño inteligente del espacio: El deposito plano se encuentra debajo del coche, renuncia a un maletero sustituyéndolo por asientos plegables en su parte trasera y un salpicadero sencillo con rediseño del concepto de guanteras y espacios libres.
iQ se usan en inglés para definir el Coeficiente Intelectual y en español se ha sustituido por un lema igualmente descriptivo y efectivo: Inteligencia Emocional.
El pequeño vehículo efectivamente está diseñado con mucho mimo, con unas líneas agradables y dos colores bastante sufridos que promete dar las prestaciones necesarias para rediseñar la conducción en ciudad.
Con una visibilidad impecable y una gran ligereza ya que su radio de giro es el más pequeño del mundo, lo que convierte a este vehículo en una opción muy razonable para aquellos que quieran sacar el máximo partido a su coche. Se puede hacer un test de conducción online en su propia web.
Preparado para un público joven posee radio, CD, 6 altavoces, capacidad de lectura MP3, WMA, lo hemos probado y tiene una Banda Sonora de lujo y en cuanto a seguridad 9 airbags lo convierten en una pieza única de ingeniería para mantenerlo seguro.
Y para celebrarlo fiesta. La cita en el Midnight Rose, el local de copas situado en la Plaza de Santa Ana en el recientemente reformado Hotel Me.
Con vistas a una de las plazas más castizas de Madrid y justo enfrente del Teatro Español los logos de Toyota se reflejaban en la fachada atrayendo a los transeúntes que se asomaban a los nuevos coches con curiosidad.
Dentro música de la mano de Dj’s, Photocall y muchas copas en un entrono urbano y divertido como el propio coche.
3 Comentarios
O estas haciendo post patrocinados, o te has comprado coche o se te ha ido la pinza..
ResponderEliminarYo lo definiría como una mezcla de los tres XD
ResponderEliminarEspero qeu me compres algo bonito en Polonia... Hacen unos bomobones con licro rebuenos.. ¡No digo nada!
Yo no tengo buenas experiencias con el tránsito...Ni como protagonista al volante, ni como observadora peatonal. Vale mencionar que vivo en el centro de Roma, donde las leyes que gobiernan la disciplina son las leyes de la selva y del sálvese quien pueda. Salir a la calle, aunque sea a pie, es una experiencia altamente estresante, donde uno teme por su vida al primer descuido.
ResponderEliminarComo conductora, nunca brillé tampoco. Entre mis experiencia extremas (que por suerte no han terminado en accidentes...graves), recuerdo que casi caemos por un precipicio en Ibiza...Chicos, chicos, no hay que conducir sin haber dormido...
Pero la que más me traumó fue durante mis primeros meses al volante...Iba con mi ahijado, que tenía en ese entonces 5 años, y sin querer atropellé a un perro. Por suerte el pobre animal vivió, pero salió corriendo antes que le diera auxilio. Desde ese día, cada vez que manejo con mi ahijado al lado y pasa un perro, el pobre niño me grita "a ese no lo mates madrina..por favor!!!"...
Ahhh...no me gusta nada manejar.
Val