Nancy con tacones y a la moda

Yo siempre he sido muy de Nancy, mucho más que de Barbie, y que de Chabeli, que una es muy viejuna ya y se pone a recordar cosas que las nuevas generaciones no conocerán.

Me gustaba Nancy porque era preciosa, rubia, redondita, guapa, y, no nos engañemos, muy grande. De todos los modelos que tenía para la muñeca recuerdo un kit de arlequín que me trajeron los Reyes Magos, uno de colores y otro en blanco y negro, eran mis favoritos. 

Y por supuesto tengo aún la Nancy comunión, dos, la mía y la de mi prima, que se volvió una atea del cupón y me la regaló porque me encantaba, tenía un rústico mecanismo de cuerda que la había bailar (bueno, moverse por la cintura girando un poco) mientras sonaba una canción. Esta proeza se debe a una cosa que pocas muñecas tenían: zapatos planos.

Por eso cuando vi que Nancy se subía en sus tacones después de todo lo que he criticado las posturas imposibles de las Barbies en este tiempo pensé que soy como una madre antigua que no quiere que su niña adolescente salga con minifalda. Que es inevitable pero que no es tan terrible... Y ahora incluso me gusta.

Vale, reconozco que me gusta especialmente porque los diseños del concurso  "Nancy con la moda" me han demostrado que mis prejuicios eran un poco arcaicos. Eso y saber que ponerse de puntillas es posible gracias a una articulación especial en las rodillas y tobillos y mi niña puede usar su zapato de toda la vida o combinarlo para tener un look más sofisticado.

De los premiados en el concurso de diseño ( realizado por estudiantes de moda y premiado con una beca), me ha enamorado el look de Berta Ferrer con su frescura y sus flamencos rosas. Aunque entiendo que Jose Carayol ha usado la misma ternura en su composición que yo al rememorar la infancia y vestir como mamá a su Nancy.

Y a ti ¿qué te parece que Nancy se haya comprado zapatos nuevos?

Más info: http://www.nancyfamosa.es/munecas/